Las críticas del teólogo Hans Kung caen mal en el Vaticano
Las denuncias del conocido teólogo suizo Hans Kung contra la línea conservadora de la Iglesia Católica, que advierte de que terminarán por transformarla en una secta, fueron rechazadas este miércoles por el cardenal Angelo Sodano, ex secretario de Estado de la Santa Sede. Seguir leyendo el arículo
"Estoy íntimamente herido", confesó a la emisora Radio Vaticano el influyente purpurado, quien fue por más de una década el brazo derecho del fallecido papa Juan Pablo II.
Los sentimientos de Sodano, de 80 años, constituyen la primera reacción de un veterano exponente de la Curia Romana a la entrevista concedida por Kung al diario francés Le Monde y reproducida este miércoles por La Stampa de Italia.
Para Kung, de 81 años, la Iglesia "corre el riesgo de convertirse en una secta" bajo el reinado de Benedicto XVI.
El Papa "defiende la idea del 'pequeño rebaño'. La misma línea de los integristas: pocos fieles, una Iglesia elitista, formada por 'verdaderos' católicos", sostiene.
"Es una ilusión creer que se pueda seguir así, sin sacerdotes, ni vocaciones. Esta evolución es cada vez más claramente una restauración", sostiene el teólogo, compañero de estudios del actual Papa, a quien le prohibieron en 1979 seguir enseñando teología por sus posiciones progresistas.
"La Iglesia debe reconocer ante todo que atraviesa una crisis profunda", sostiene Kung, quien participó en la década de los 60 en los preparativos del Concilio Vaticano II que modernizó y renovó entonces la institución católica.
Para el teólogo, que fue recibido por Benedicto XVI en el 2005 pocos meses después de su elección como pontífice, los cuatro años del pontificado del primer Papa alemán de la era moderna han demostrado que no se realizará reforma alguna, "ni siquiera lentamente", comentó.
"Me pregunto si es capaz de algo valiente", sostiene Kung, quien pide al jefe de la Iglesia Católica que aborde asuntos que considera prioritarios, entre ellos "la admisión a la comunión de los divorciados (...), la condena a todas las formas de contracepción (...) y la abolición de la ley del celibato" para los sacerdotes.
"En la Iglesia siempre es posible hacer críticas fraternas, desde la época de San Pedro y San Pablo. Pero una crítica tan amarga, sobre todo tan generalizada, no contribuye a la unión de la Iglesia", declaró Sodano.
Para el purpurado italiano "se trata de afirmaciones lanzadas sin pruebas" contra un pontífice que según él ha trabajado a favor de la unidad de los católicos.
A juicio del teólogo progresista, Benedicto XVI "ha vivido siempre en un ambiente eclesiástico, ha viajado muy poco, ha permanecido encerrado en el Vaticano -que es como el Kremlin-, separado de toda crítica", por lo que comete "errores" en el gobierno del Vaticano.
Un ejemplo de ese error es la rehabilitación a finales de enero de los cuatro obispos del movimiento ultraconservador de Marcel Lefebvre, entre ellos el obispo que niega la existencia del Holocausto.
"No fue un error de comunicación, ni de táctica", sostiene Kung, sino de "evaluación" del impacto que el gesto podía tener con y dentro del mundo judío, ya que "todo el mundo sabía que los cuatro obispos son antisemistas", dijo.
"El problema es que el Papa rechaza una relación nueva con el hebraísmo", entre los principios que surgieron tras la histórica asamblea de los años 60, estimó.
"Es un escándalo que para el 50 aniversario del lanzamiento del Concilio Vaticano II por parte de Juan XXIII, el Papa no haya elogiado su predecesor, sino decidido levantar la excomunión a las personas que se opusieron a él", subrayó al referirse a los lefebvrianos.
Las denuncias del conocido teólogo suizo Hans Kung contra la línea conservadora de la Iglesia Católica, que advierte de que terminarán por transformarla en una secta, fueron rechazadas este miércoles por el cardenal Angelo Sodano, ex secretario de Estado de la Santa Sede. Seguir leyendo el arículo
"Estoy íntimamente herido", confesó a la emisora Radio Vaticano el influyente purpurado, quien fue por más de una década el brazo derecho del fallecido papa Juan Pablo II.
Los sentimientos de Sodano, de 80 años, constituyen la primera reacción de un veterano exponente de la Curia Romana a la entrevista concedida por Kung al diario francés Le Monde y reproducida este miércoles por La Stampa de Italia.
Para Kung, de 81 años, la Iglesia "corre el riesgo de convertirse en una secta" bajo el reinado de Benedicto XVI.
El Papa "defiende la idea del 'pequeño rebaño'. La misma línea de los integristas: pocos fieles, una Iglesia elitista, formada por 'verdaderos' católicos", sostiene.
"Es una ilusión creer que se pueda seguir así, sin sacerdotes, ni vocaciones. Esta evolución es cada vez más claramente una restauración", sostiene el teólogo, compañero de estudios del actual Papa, a quien le prohibieron en 1979 seguir enseñando teología por sus posiciones progresistas.
"La Iglesia debe reconocer ante todo que atraviesa una crisis profunda", sostiene Kung, quien participó en la década de los 60 en los preparativos del Concilio Vaticano II que modernizó y renovó entonces la institución católica.
Para el teólogo, que fue recibido por Benedicto XVI en el 2005 pocos meses después de su elección como pontífice, los cuatro años del pontificado del primer Papa alemán de la era moderna han demostrado que no se realizará reforma alguna, "ni siquiera lentamente", comentó.
"Me pregunto si es capaz de algo valiente", sostiene Kung, quien pide al jefe de la Iglesia Católica que aborde asuntos que considera prioritarios, entre ellos "la admisión a la comunión de los divorciados (...), la condena a todas las formas de contracepción (...) y la abolición de la ley del celibato" para los sacerdotes.
"En la Iglesia siempre es posible hacer críticas fraternas, desde la época de San Pedro y San Pablo. Pero una crítica tan amarga, sobre todo tan generalizada, no contribuye a la unión de la Iglesia", declaró Sodano.
Para el purpurado italiano "se trata de afirmaciones lanzadas sin pruebas" contra un pontífice que según él ha trabajado a favor de la unidad de los católicos.
A juicio del teólogo progresista, Benedicto XVI "ha vivido siempre en un ambiente eclesiástico, ha viajado muy poco, ha permanecido encerrado en el Vaticano -que es como el Kremlin-, separado de toda crítica", por lo que comete "errores" en el gobierno del Vaticano.
Un ejemplo de ese error es la rehabilitación a finales de enero de los cuatro obispos del movimiento ultraconservador de Marcel Lefebvre, entre ellos el obispo que niega la existencia del Holocausto.
"No fue un error de comunicación, ni de táctica", sostiene Kung, sino de "evaluación" del impacto que el gesto podía tener con y dentro del mundo judío, ya que "todo el mundo sabía que los cuatro obispos son antisemistas", dijo.
"El problema es que el Papa rechaza una relación nueva con el hebraísmo", entre los principios que surgieron tras la histórica asamblea de los años 60, estimó.
"Es un escándalo que para el 50 aniversario del lanzamiento del Concilio Vaticano II por parte de Juan XXIII, el Papa no haya elogiado su predecesor, sino decidido levantar la excomunión a las personas que se opusieron a él", subrayó al referirse a los lefebvrianos.
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